«Las reglamentaciones tan estrictas surgieron por el descontrol que había en el sector»
Yolanda Barqueros Blanco, Adjunta a Dirección deDosniha, nos dedicó unos minutos durante la XXXV Feria Internacional del Juego. Cuando acabamos la conversación, teníamos la sensación de haber hablado durante horas con ella, pero lo cierto es que en la grabadora sólo teníamos registrada una pista de apenas 12 minutos.
Antes de discutir sobre quién había olvidado pulsar el botón de grabar, y lamentarnos por el trabajo perdido, decidimos escuchar lo que había quedado recogido; y, sorpresa, esa era la duración real de la charla. Así que, gracias a Yolanda, aprendimos algo nuevo para nosotros: la intensidad de la conversación es proporcional a la rapidez con la que pasa el tiempo. Es lo que llaman Relatividad periodística. Y si no la llaman así, deberían.
Descubramos el contenido de la conversación. Comenzamos como siempre pidiendo que nos cuente su historia en el sector. Nos enteramos de que Yolanda Barqueros lleva quince años en el negocio, y forma parte de ese nutrido grupo de empresarios hechos a sí mismos, de esos que empiezan con poco, y acaban teniendo mucho gracias a una buena gestión.
A partir de 2007 Dosniha se convierte en fabricante, y con la homologación de la primera ruleta para salones dan el campanazo. Tanto, que desde hace cuatro años trabajan junto a Merkur, uno de los grandes del ramo a nivel internacional. Como ella no trabaja en Andalucía, poco podemos hablar sobre nuestra comunidad –es hija de sevillana, no obstante-, sin embargo, es una mujer de éxito en un mundillo masculino, y el tema femenino también queremos estudiarlo, así que tiramos por ahí.
Nos sorprendemos cuando nos cuenta que«la política de Carlos Chacón (presidente de Dosniha) era rodearse de mujeres. La empresa era un 90% mujeres. A raíz de hacernos fabricantes la cosa se niveló». Parece que algo está cambiando, y esta vez es de verdad. Con todo, desde el punto de vista del cliente aún hay mucho camino que recorrer, sobre todo si nos comparamos con otros países.«Alemania tiene un 30% de jugadores que son mujeres». Poco a poco
Tampoco podemos dejar pasar la posibilidad de hablar con un fabricante por las trabas de la administración. Yolanda no es especialmente crítica en este sentido, al contrario, cree que la regulación favorece a los operadores serios, y acaba con los llamados piratas, muy comunes antes de la legislación del juego. Con todo,«cada máquina se tiene que homologar en 17 comunidades autónomas. Se desperdicia tiempo y muchísimo dinero. Es como si trabajáramos en 17 países». En este aspecto, sí se alinea con la mayoría.
Pero para unos recién llegados como nosotros, una de las cosas que más llama la atención son las azafatas y su atuendo. O la ausencia de atuendo, podríamos decir. Y así se lo hacemos saber –algo quizás injusto, teniendo en cuenta que las azafatas de Dosniha eran justamente eso, azafatas-.«Cada año se ve menos. De hecho, creo que es un error. Son los propios empresarios los que se quejan, quieren desvincularse de esa imagen». O sea, que en este sentido, también se aprecia un cambio. Y hablando sobre apariencias, sobre la imagen del juego nos cuenta:«antes la gente relacionaba el juego con el dinero sucio, ahora con ganar dinero. Si antes era algo despectivo, ahora es todo lo contrario. Rafa Nadal anuncia póquer en la tele. Sin embargo, aquí todavía le gente entra con respeto, tienes que tener los salones con vinilos para que no se vea el interior». Es cuanto menos curioso que se empiece a considerar el juego como un negocio, pero no cambie la consideración sobre el jugador.
Yolanda Barqueros Blanco fue candidata en dos categorías de los premiosWomen in Game Awards: la de talento oculto del año, y la de estrella del futuro. Francamente, ambos describen muy bien su trayectoria.